GAFAS DE CERCA: January 2013

GAFAS DE CERCA

Sunday, January 20, 2013

TREN HOTEL ( Libro de Viajes)




Son dos literas. Están muy juntas.
Es pequeño, incomodo, y siempre discutimos.
Pero qué bonito es dormir con el traqueteo
del tren –el tren hotel Chamatín-Austerliz-,
y sentir las paradas entre sueño:
ya estamos en Vitoria, ya en Burdeos.
Siempre nos damos las buenas noches,
y nos dormimos en seguida.
Estamos tan juntos los cuatro
que es imposible no sentirse unidos.

Friday, January 18, 2013

PALABRAS PARA UN AMIGO



Te digo,
como dijo ese poeta
(que tal vez no hayas leído)

que todo pasará. No lo dudes.
Dicen que dios
(¿qué dios? dirás),
escribe con renglones torcidos,
pero escribe bien.
No te digo que no:
ganas sí dan de darle una regla,
a veces. Pero...
Todo pasará, te digo.
Resplandeces como un lucero:
tienes tanta luz y tanta fuerza.
Lo sé aunque no pueda verte.
Todo pasará, es una nube.
Sólo una nube pasajera.
No bajes peldaños.
No te escondas.
Todo pasará, ¿me crees?
Cualquier día, no lejano,
nos reiremos de nuevo.
Brindaremos.
Las olas siguen como siempre
yendo y viniendo: confía.

Friday, January 11, 2013

52 MANDAMIENTOS Y UN DESEO


Dejarme la piel con mis compañeros de camino,
dormir con los dientes limpios y la cabeza tranquila,
soportar lo mejor posible los envites del destino,

tener siempre a mano una taza de tila.

No convertirme en imán cuando me sienta atraída,
congelar algunos ratos mi pesado pensamiento,
aflojar como un muñeco cuando no tenga salida,
aprender a defenderme sin sentir remordimiento.

Ser capaz de malgastar el tiempo sin hacer nada,
caminar hacia el dentista sin que me tiemblen las manos,

 entrenarme para estar algunas veces callada,
bajar el tono de voz: piano, piano, piano...

Tirar todos los objetos y cacharros sin sentido,
poner la otra mejilla sin que por eso me duela,
no sentir tanta añoranza por lo que hube vivido,
prepararme para el día en que me llamen abuela.

Abrazar mientras que nado, al agua, al mar, a la vida,
besar siempre que lo sienta, sin medida ni control,
largarme cuando me escuchen con la mirada perdida,
no tirar mis margaritas a "los que dan el jamón".

Saber que si lo deseo, se multiplican los peces,
elegir bien el camino, no todos llevan a Roma,
de que me voy a morir, olvidarme algunas veces,
santificar las risas, las carcajadas, las bromas.

Tener mi "gafas-de-cerca" siempre limpia y reluciente,
que no falte agua fresquita dentro de mi nevera,
ser con "mi media naranja" feliz razonablemente,
tener claro que en mí misma yo soy la naranja entera.

Beber gazpacho en verano, caldo de pollo en invierno,
regar a Luis y Miguel cada día de mi vida,
cuando me canse del cielo, irme a vivir al infierno,
regalarle una sonrisa a todo el que me lo pida.

Mirarme en una mirada (¡que se extingan los espejos!),
tener siempre por si
acaso la palabra preparada,
sentir sin razón de ser, imaginar sin complejo,
y tener para dormir, un colchón y una almohada.

Comenzar cada mañana como si fuera una vida,
cocinar como quien hace un cuadro o una canción,
abrazar para que sanen más rápido las heridas,
dudar que uno más uno, todo el rato sumen dos.

Arrancarme los dos ojos, si hago daño a un inocente,
si estoy desorientada, irme a contemplar el mar,
decir con una mirada lo que hablar no es conveniente,
preferir a las pastillas, lecturas, para curar.

Visitar de vez en cuando un sitio desconocido,
caminar contra corriente si la ocasión lo merece,
seguir poniendo en las letras lo pensado y lo vivido,
ser profunda algunos ratos, y liviana muchas veces.

Tener a mi corazón hasta los topes de gente,

  devolver a quien me da, cuarenta veces por una,
vivir la vida despacio, y morirme de repente,
dar al sol lo que es del sol, y a la luna de la luna.